Los escaparates de primavera verano suelen ser más originales y atrevidos que los diseñados para la época invernal. Para atraer a los clientes, los diseñadores suelen realizar propuestas coloristas usando las tendencias de la temporada, eligiendo los colores, materiales y elementos más de moda del momento, con el fin de conseguir la atención de los potenciales clientes.

A continuación, vamos a presentar una serie de recursos útiles, que le ayudaran a configurar un escaparate más impactante y atractivo en esta primavera verano, independientemente del tamaño disponible para la instalación.

Usa el color ideal

Para empezar, es importante elegir el color más adecuado para un escaparate veraniego, esta temporada son tendencia los rojos, el azul y el rosa pastel, los verdes y los neutros como el beige y el café. Habitualmente asociamos a la primavera verano a colores cálidos, por lo que los colores tendencia de este año son perfectos, por otro lado, si se disponen de colores corporativos sin lugar a dudas se debe recurrir a ellos. Lo más importante de todo es que el producto que expongas resalte sobre el todo y no quede eclipsado por el conjunto de tonalidades elegida.

Tematiza según el uso sin excesos

Según los productos que comercialicemos pensaremos que escenario queremos mostrar, por ejemplo, en un escaparate destinado a cosmética natural, es usual apostar por soluciones que evoquen a la naturaleza y al bienestar. En este caso, si se usan colores neutros y verdes, y se juega con el uso de plantas y otros elementos de decoración, se puede lograr una escenografía muy atractiva. En cualquier tipología de escaparate veraniego, es conveniente buscar escenas que nos vinculen a viajes, relajación, descanso, por lo que usar bicicletas retro o animales, hechos de pvc o metacrilato de colores pueden resultar muy atractivos.

Cabe recordar que, por lo general, respetaremos la premisa sobre el que  menos es más, ya que cuando sobrecargamos el espacio, saturamos de información al cliente potencial, por lo que es importante buscar el equilibrio usando lo justo y necesario. En todo caso, es importante analizar el tipo de negocio en el que se hace la intervención, pues no es lo mismo un escaparate para una óptica (neutro y sobrio) que para una tienda de ropa infantil (más saturada y con color).

Usa expositores PLV

Los propios expositores del escaparate, se pueden convertir en los mejores elementos de decoración de la misma, creando un diálogo entre el producto expuesto y el elemento de soporte. Así que los expositores PLV pueden ser unos grandes aliados, de bajo coste y fácil manipulación y montaje. En el mercado del PLV encontramos muchos materiales aptos, siendo los de cartón, metacrilato o pvc los más habituales.  Cualquiera de estos soportes son aconsejables, ya que se pueden adaptar sin problemas a la forma solicitada por el diseñador.  Con ellos, destacar el elemento expuesto  resulta sumamente sencillo.

Ilumina adecuadamente y usa cartelería

Para destacar el producto expuesto, es necesario que se use la luz de una manera correcta, de manera que se enfoque lo que se quiere promocionar. La combinación de luces directas e indirectas (desde los lados o desde abajo), de luces frías y cálidas nos ofrece un sinfín de combinaciones. Por ejemplo, el uso de luz cenital enfocada al escaparate provocara que el cliente potencial vea desde fuera la escenificación, y una vez entre al local se centre en lo expuesto.

En todo escaparate de primavera-verano llamativo encontraremos elementos de cartelería, rotulación y fotografías. Estos elementos ayudan a personalizar nuestra escenografía, el uso del PVC como soporte apto para impresión digital de alta definición, conseguirá un resultado óptimo a un precio muy competitivo

En conclusión, realizar un escaparate de calidad, llamativo y original dará valor añadido a tu propuesta y así llamará la atención a más clientes potenciales.