Dentro de los materiales termoplásticos, existe uno especialmente valorado entre los artistas y diseñadores por el amplio abanico de posibilidades que les brinda: el metacrilato (Policril).

La posibilidad de reproducción de cualquier color de la paleta, su alta resistencia al paso del tiempo, su maleabilidad y fácil manipulación, o la expresividad de los efectos lumínicos que se producen en su superficie, son algunas de las características que lo definen.

Según la obra a realizar, el creativo ha profundizado en alguna de estas propiedades para conseguir sus objetivos, a continuación, les mostramos unas pinceladas de lo que se puede conseguir aprovechando sus ventajas.

Carta de colores ilimitada

Aunque disponemos de una amplia carta de colores estándar en Policril colada, la creatividad del diseñador es ilimitada, por lo que, si las exigencias especiales de un proyecto requieren de un RAL específico, desde IRPEN ofrecemos la posibilidad de contratipar ese color y fabricarlo.

Al tratarse de PMMA colada, las producciones de colores personalizados son de tiradas de pocas cantidades, el número de planchas variará dependiendo principalmente de los siguientes parámetros:

• Del color solicitado: translúcido, opal u opaco.
• Del acabado: liso, mate o doble mate.
• De la especialidad, HF (alta fluorescencia), LED (especial para iluminación), NK (gama de aspecto nacarado en colores metalizados).
• Del grosor.

Durabilidad y resistencia en aplicaciones a la intemperie

El Policril (PMMA), es el termoplástico más estable frente a la acción de los rayos ultravioleta, sin que su apariencia física ni sus propiedades mecánicas se vean alteradas. Una de sus mayores ventajas respecto al resto de materiales es la estabilidad de los colores tras el paso de los años de exposición del material a la intemperie.

Además, cabe destacar tanto su bajo peso (la mitad que la de un vidrio), como su buen comportamiento frente a la acción de la abrasión del ambiente, siendo este último, hasta siete veces superior a la de un policarbonato compacto sin tratamiento específico.

Termo formable / fácil manipulación

Además, de sus buenas propiedades ópticas y su durabilidad, el PMMA, permite trabajarlo fácilmente, ya sea en frío o en caliente.

Desde operaciones básicas de primer nivel (corte/esmerilado/pulido), a otras más delicadas de segundo nivel mediante el aporte de calor (doblado/moldeo básico). El PMMA colada permite que a determinada temperatura su rigidez habitual se pierda y pasa a comportarse como un material dúctil y moldeable. Cuando el Policril se calienta a temperaturas alrededor de los 140-170°C, permite trabajarlo en tres dimensiones, llegando a poderse realizar operaciones complejas de tercer nivel (moldeo complejo), dónde los moldes exigen una mayor complejidad y presiones superiores.

Efectos lumínicos y metacrilato

El metacrilato permite tanto la transmisión como la difusión de la luz. En consecuencia, los efectos lumínicos que se pueden conseguir son muy atractivos y variados desde un punto de vista creativo.

Gracias a su capacidad de reflejar/ refractar un rayo de luz incidente haciendo que la luz se abra y distribuya en todas direcciones desde el punto de incidencia. Si manipulamos la superficie mediante técnicas de grabado/fresado, se podrá conseguir direccionar la luz a dónde el artista imagine.

Manipulando la superficie y posteriormente retroiluminando homogéneamente la pieza se pueden conseguir efectos tridimensionales.